martes, 26 de octubre de 2010

TERAPIA ECUESTRE

 Tuvimos el agrado de asistir al centro de Terapia Ecuestre de Las Condes, he aquí nuestra experiencia...

            La Terapia Ecuestre es una técnica de rehabilitación que se  fundamenta en como el caballo transmite movimientos rítmicos y simétricos a la persona que son los mismos que el ser humano presenta al andar, pero no solo con un componente rehabilitador, sino que también con un componente recreativo.

            Es una terapia muy beneficiosa, ya que impacta en muchos ámbitos del cuerpo y desempeño humano. Contribuye positivamente en las aéreas cognitivas, físicas, emocionales y sociales de personas con discapacidad. Específicamente,   ayuda a mejorar el control postural y de tronco, el equilibrio, coordinación de movimientos, es útil para el fortalecimiento de los músculos, estimula la integración sensorial, mejora de rangos articulares, elongación, relajación, estimulación del sistema nervioso, entre otras cosas. Por otra parte, también contribuye a una significativa mejora en procesos básicos para el aprendizaje, al favorecer la comunicación, concentración y memoria. Asimismo, se produce un intercambio afectivo con el animal.

            El centro ecuestre de Las Condes recibe a distintas personas con necesidades y características diferentes. No hay un rango de edad determinado para las personas que solicitan esta terapia ya que esta misma puede ser para niños desde aproximadamente 3 años hasta personas adultas, según sea la necesidad de la intervención. Tampoco hay una diferencia en género ya que puede ir enfocada tanto hombres como mujeres y a distintos tipos de personas, como por ejemplo personas con Síndrome de Down, Esclerosis múltiple, secuelas de accidentes, problemas neurológicos, Hipo o hipertonía muscular, Parálisis cerebral, Lesiones medulares, Retraso psicomotor, Espina Bífida, entre otros.

                        Cada sesión dura aproximadamente 30 minutos, y se realiza simultáneamente con 5 participantes dependiendo del día y cada uno de ellos con atención personalizada. Primero, se da un par de vueltas al recinto, con la persona en el caballo con la asistencia que sea requerida. Luego, se le pasa a la persona un pequeño aro de goma, el cual debe atravesarlo a un palo que se coloca a distintas distancias de él, para ir trabajando con la estabilidad del tronco, control postural, entre otras. Después de esto la persona debe trabajar con aros grandes, los cuales los tiene alrededor del cuerpo y debe ir retirando paulatinamente. Al término de esto, se trabaja con el trote a caballo para que la persona logre estabilidad, control postural, desarrollo de fuerza muscular y otras cosas que se deben trabajar. Luego se dan unas vueltas al recinto como para dar por terminada la sesión. Es importante señalar que durante la sesión cada persona tiene la asistencia que requiera, por ejemplo el día de nuestra visita me tocó asistir con una de mis compañeras a pablo, un hombre de 30 años que asistía a terapia ecuestre hace algunos años, con el que se trabajaba lo antes señalado. Para esto durante toda la sesión con mi compañera lo teníamos sostenido de las piernas para evitar algún tipo de accidente.

            La participación de los usuarios es activa y pasiva dependiendo el caso. Por ejemplo, el día de nuestra visita asistimos una sesión en la cual había participantes que realizaban sus ejercicios solos o con ayuda ocasional y se encontraban alerta durante toda la sesión para ver que tenían que realizar. En cambo, hubo un caso en el cual llegó un hombre con espina bífida el cual lo montaron encima del animal y participó durante la sesión de manera pasiva, beneficiándose de los movimientos del caballo pero no realizando ejercicios por sí solo.

            El ambiente que se vive en el centro es bastante grato ya que la mayoría de los usuarios se conocen entre ellos y ocurre lo mismo con profesores y asistentes a la sesión. Tiene sin duda un fuerte componente recreativo ya que se presta para bromas y chistes, lo cual hace que una terapia no sea exhaustiva, si no que todo lo contrario, lo que se ve reflejado en que los participantes asisten contentos y sin ganas de que la sesión acabe. También tiene un componente familiar, ya que los usuarios asisten con algún miembro de su familia o alguien cercano, es por esto que se crean lazos y se da una sana interacción.

            El grupo está a cargo y es supervisado en todo momento por la profesora, pero cada persona tiene uno o dos asistentes, alguien que lleva el caballo y alguien que monte atrás del usuario si fuese necesario. Durante en desarrollo de la sesión, los asistentes son los que van realizando y ayudando a realizar los ejercicios pero la profesora a cargo va rotando constantemente para ver si estos se están realizando bien o debe haber una modificación en estos mismos.

            Esta terapia, si bien es cierto no ha alcanzado los rangos de popularidad que a muchos nos gustaría, es una terapia bastante beneficiosa y que beneficia al ser humano en muchos ámbitos, lo cual la hace bastante completa. Su singular modo de trabajo, basado en la forma similar al humano que toma el caballo al caminar y la transmisión de estos movimientos a la persona, hace que esta terapia alcance logros bastante positivos en un tiempo relativo, pero evaluado como positivo.

            Desde sus inicios en nuestro país, en el año 1986, ha tenido un alto impacto en nuestra población y ha ido incorporándose paulatinamente a más centros de Chile, aunque actualmente, siendo una actividad ya extendida y con una visión sólida a futuro aún son pocos los profesionales calificados para realizar esta terapia, siendo menos aun los lugares donde  es posible acudir en el caso de requerirla.

Es por esto, que creo que Chile es un país subdesarrollado en muchísimos aspectos. Y no me refiero a algo tecnológico, si no a algo que v un poco mas allá que es la visión que se tiene de la discapacidad y que a partir de esta misma se traen pocas técnicas que se sabe que son fructíferas o no se trabaja con ellas de manera adecuada. Asimismo, nos damos cuenta que hay pocos profesionales relacionados con el área porque también no hay tanto interés, lo cual creo debería cambiar si queremos que Chile comience a ser un país más inclusivo y que comparta con su población nuevas técnicas que traigan felicidad y oportunidades cada día a más personas.

3 comentarios:

  1. ¡Muy interesante! La verdad es que no tuve la oportunidad de participar de ese taller por tiempo y es un agrado poder leer sobre éste aquí ya que es uno de mis temas de interés en cuanto a terapia

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  2. Que lindo!...Es un tema demasiado entretenido e interesante, y agradezco el difundir información acerca de e´l, ya que nos da una idea más general acerca de qué se trata... Como dice javi, también es uno de los puntos que más me interesan y gustan dentro de la terapia.

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  3. Yo participé activamente de ese taller, incluso estuve ayudando a una niña llamada Maite en su sesión de terapia... fue muy interesante, gratificante y renovador.

    Al igual que con la canoterapia, es maravilloso el aporte de los animales en la vida del ser humano, deberíamos considerar el gran feedback que se establece entre ellos y los usuarios... como objeto potenciador de la terapia.

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